TODO EL CUERPO EN UN HOTEL

Si alguien pudiera convencerme de quedarme en un hotel,
quitarme la carga, la pesada caminata de la madrugada, el sonido de que no hay sonido, la sed.
Si alguien pudiera convencerme de quedarme un dia o dos,
llevarme a la cama, quitarme las ganas de la madrugada, el sonido de los huesos vacios, la piel.


Si alguien pudiera acompañarme al desayuno de palabras,
llenarme el alma con confianza, dejandose caer contra la arruga de la sabana, de un mantel.
Si alguien pudiera acompañarme a la cena de placer,
a dar un paso obceno, a deambular entre nosotros mismos, entre el espacio, entre querer.

En un hotel sin techo para saber cuantas estrellas,
en una habitacion de selva.
En un hotel con camas que nos digan lo que escuhan las paredes,
en un hotel con torres de arena, escamas en los techos, musica del bar.

En un hotel en el desierto para volvernos locos, para comer aun mas sedientos, para buscar lenguas de mar, nubes de flor, sentidos por la humedad distraidos.
Si puideramos ser dueños de ese hotel, darle mantenimiento, orden, forma, diseño, conciencia, civilizacion...

Si alguien pudiera convencerme de quedarme en un hotel,
naceria como cuando nace el flujo, la idea dominante, el capricho de la felicidad.
Si alguien pudiera acompañarme en ese hotel,
con gusto cavaria CON TODO EL CUERPO mi tumba el primer dia.